Iniciativa busca mejorar la calidad del aire y ofrecer sombra en un contexto de aumento de temperaturas.
La ciudad de Boston ha lanzado una innovadora iniciativa que consiste en la instalación de techos verdes en 30 paradas de autobús a lo largo de la ruta #28 del Massachusetts Bay Transportation Authority (MBTA). Este proyecto, realizado en colaboración con socios comunitarios, tiene como objetivo proporcionar sombra, mejorar la calidad del aire, aumentar la retención de aguas pluviales y generar nuevos espacios verdes en áreas con alta demanda de transporte público.
La selección de estas paradas se justifica, ya que se encuentran en una de las rutas más transitadas del sistema MBTA y en vecindarios que sufren desproporcionadamente los efectos del calor extremo. Durante los próximos tres años, la ciudad y sus aliados evaluarán este proyecto piloto para determinar su viabilidad y posibles extensiones a otras ubicaciones en Boston.
“Estos techos verdes en las paradas de autobús no solo representan el avance de Boston hacia la sostenibilidad, sino que también son una solución práctica y escalable ante los retos más apremiantes que enfrentamos como ciudad,” Michelle Wu, alcaldesa de Boston
Los nuevos techos proporcionan sombra directa sobre las paradas, que normalmente tienen techos transparentes, lo que contribuye a mantener frescos a los usuarios en días calurosos. Además, las plantaciones absorben agua de lluvia, reduciendo el escurrimiento y atrapando contaminantes, lo que resulta en una mejor calidad del agua y una prevención de inundaciones. También se espera que estos pequeños jardines en las azoteas apoyen a aves y polinizadores, promoviendo así una mayor biodiversidad en entornos urbanos. Según la ciudad, esta es la mayor instalación de techos verdes en paradas de autobús en el país.

Esta iniciativa forma parte de las estrategias del Plan de Calor de Boston, que incluye la estrategia “Cool Commutes”, destinada a crear un ambiente más fresco en las paradas de autobús. La ruta 28, que conecta Mattapan, Dorchester y Roxbury, es prioritaria debido a su intersección con áreas de islas de calor urbano, que experimentan temperaturas más altas durante períodos prolongados.
Con más de la mitad de los usuarios de estas rutas sin tarifa clasificándose como de bajos ingresos, este proyecto también responde a las desigualdades climáticas que enfrentan muchas comunidades. La ruta 28 no solo es la más popular del sistema MBTA, sino que también es una de las tres líneas de autobús sin costo en Boston.
“El lanzamiento de estos techos verdes es un ejemplo tangible de cómo podemos reinventar nuestra infraestructura urbana para que sea más resiliente, sostenible y equitativa,” Brian Swett, director de clima de la ciudad de Boston.
Para la instalación y el mantenimiento de los techos verdes, Boston se asoció con Social Impact Collective, una firma de arquitectura y diseño de propiedad minoritaria, Weston Nurseries, un vivero local, y YouthBuild Boston, una organización sin fines de lucro que apoya a jóvenes en situación de desventaja en su camino hacia la industria de la construcción y el diseño.
La recolección y análisis de datos se llevará a cabo en colaboración con Social Impact Collective, asegurando que los beneficios del proyecto sean documentados y comprendidos. Se recopilarán datos sobre la retención de aguas pluviales, la temperatura de los techos verdes en comparación con las aceras, y el crecimiento de las plantas.
Oliver Sellers-Garcia, director del Green New Deal y comisionado del Departamento de Medio Ambiente, subrayó que “el número de socios públicos y privados involucrados en este proyecto demuestra el enfoque integral de esta administración para mejorar la sostenibilidad y la justicia social”.
Este proyecto de techos verdes es una continuación de un programa piloto exitoso iniciado en 2014 y busca estandarizar la integración de infraestructura verde en las paradas de autobús de Boston y potencialmente en otros mobiliarios urbanos. Los techos verdes serán monitoreados y mantenidos durante tres años para evaluar su impacto en el calor, la calidad del aire, la gestión de aguas pluviales y la biodiversidad.





