El embalse de Arenal, el más importante de Costa Rica, ha alcanzado un nivel de 539 metros sobre el nivel del mar (msnm), superando la cota esperada para el último trimestre de 2024. Este logro representa un aumento de un metro respecto a la altura registrada en enero de este año y una recuperación de 8 metros en los últimos cinco meses, lo que fortalecerá la reserva energética de cara al verano de 2025.
Claves de la recuperación: lluvias y gestión del recurso
Según el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el embalse de Arenal, alimentado principalmente por los ríos Arenal, Caño Negro, Chiquito y Piedras, se benefició en gran medida de un aumento en las lluvias en las regiones Norte y Caribe. Estas precipitaciones, que han sido superiores a las del último año, han permitido recuperar los niveles de agua necesarios para el Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Además del factor climático, el ICE implementó medidas estratégicas para optimizar el uso de los recursos disponibles, manteniendo un balance que garantizó la satisfacción de la demanda energética nacional sin comprometer la conservación del embalse. A su vez, el ICE asegura el suministro de agua al Distrito de Riego Arenal–Tempisque, una gestión clave para los sectores agrícola e industrial de la zona.
“El embalse de Arenal es fundamental para asegurar el abastecimiento energético durante la estación seca y reducir la dependencia en plantas térmicas. En comparación con enero de 2024, ya hemos ganado un metro adicional en su nivel, y esperamos que este crecimiento continúe durante lo que resta de la época lluviosa,” Marco Acuña, presidente de Grupo ICE
Operación sin contratiempos
El SEN opera con normalidad, y el ICE proyecta condiciones favorables para el próximo año en la generación de energía renovable. Sin embargo, Acuña enfatizó la importancia de mantener una estrategia cuidadosa, dada la dependencia de fuentes hídricas y la naturaleza renovable de la matriz energética costarricense.
En mayo, el nivel del embalse había bajado hasta 531 msnm, el punto más bajo en varios años. Desde entonces, se ha recuperado hasta los 539 msnm actuales, superando en 4 metros las previsiones iniciales. Esta recuperación no solo asegura la operación de las tres plantas hidroeléctricas que dependen de Arenal (Arenal, Dengo y Sandillal) sino que también es un avance para afrontar con optimismo el próximo año energético.






