La Municipalidad de Alajuela anunció una transformación vial significativa en una de sus arterias más emblemáticas: la Calle Ancha, que dejará de tener doble sentido para convertirse en una vía de un solo carril direccional. El cambio forma parte de un ambicioso proyecto de ordenamiento urbano orientado a modernizar la movilidad, recuperar el espacio público y dinamizar el comercio en el casco central del cantón.

Según lo informado por el alcalde Roberto Thompson, la decisión se basa en estudios técnicos que proyectan una reducción sustancial en los tiempos de desplazamiento, además de una mayor fluidez vehicular. El nuevo diseño contempla un reordenamiento integral de aproximadamente cuatro kilómetros de vía, distribuidos en cuatro carriles con diferentes funciones: uno exclusivo para autobuses y taxis, dos carriles centrales para vehículos particulares, y un carril izquierdo para parqueo regulado, acompañado de arborización y zonas peatonales.

La propuesta también incluye mejoras en las aceras, instalación de mobiliario urbano, nueva semaforización y señalización, todo bajo el objetivo de crear una ciudad más amable con peatones, ciclistas y usuarios del transporte público.

Una calle con historia y peso simbólico

La Calle Ancha no es solo una vía de tránsito; forma parte del imaginario urbano alajuelense. Históricamente, ha servido como límite natural del casco central y como eje articulador del movimiento vehicular en dirección norte-sur. Su amplitud le otorgó desde temprano el apodo de “calle ancha”, diferenciándola del resto de las estrechas vías que caracterizaban al centro de Alajuela en las primeras décadas del siglo XX.

Durante buena parte del siglo pasado, esta calle albergó importantes desfiles cívicos, actividades comunales y fue testigo de la transformación del cantón conforme crecía su densidad poblacional y su parque automotor. Su transformación representa, por tanto, no solo un cambio funcional sino también simbólico en la forma en que se concibe el centro urbano de Alajuela.

Un modelo de urbanismo más inclusivo

El rediseño responde a una tendencia internacional en planificación urbana que busca devolverle protagonismo al peatón, ordenar el tránsito de forma más eficiente y fomentar la actividad comercial a escala barrial. En ese sentido, el proyecto de Calle Ancha se alinea con políticas de movilidad sostenible: reserva carriles para transporte público, regula el estacionamiento, y apuesta por espacios más verdes y accesibles.

La municipalidad ha venido preparando este cambio desde hace varios meses, con demarcaciones, reparaciones viales y mejoras en calles aledañas. Además, se contempla la construcción de nuevos conectores viales para evitar cuellos de botella en los ingresos y salidas del centro.

Opiniones divididas

Como era de esperarse, el anuncio ha generado diversas reacciones en redes sociales. Mientras algunos vecinos aplauden la iniciativa por considerar que mejorará la movilidad y modernizará la ciudad, otros han manifestado inquietudes sobre la ejecución y el control efectivo del parqueo y uso de carriles.

El reto ahora será implementar la medida con eficacia y asegurar que los beneficios proyectados se concreten en la práctica. Si el proyecto cumple sus objetivos, Calle Ancha podría convertirse en un referente de transformación urbana a nivel municipal.