Condominio Cristal transforma la vida de 168 familias en Cartago gracias a inversión del BANHVI

Cartago celebra una importante noticia en materia de vivienda social: 168 familias del cantón recibieron las llaves de su nuevo hogar en el condominio residencial vertical Cristal, un proyecto impulsado por el Banco Hipotecario de la Vivienda (BANHVI) con una inversión que supera los ¢6.685 millones.

El conjunto habitacional marca un cambio profundo en la calidad de vida de 520 personas en situación de extrema necesidad. Ahora cuentan con viviendas seguras, acceso a servicios esenciales y la oportunidad de construir comunidad en un entorno digno y planificado.

El proyecto está compuesto por 14 torres de tres pisos, con cuatro apartamentos por nivel, diseñadas bajo la modalidad de condominio vertical. Además de las viviendas, el complejo incluye cierre perimetral, áreas recreativas, módulos de juegos infantiles, caseta de seguridad, parqueos, red eléctrica, telecomunicaciones, alcantarillado sanitario y pluvial, así como rampas y aceras accesibles.

El desarrollo estuvo a cargo de Constructora Mar Azul S.A., con la supervisión de Grupo Mutual Alajuela, entidad autorizada para validar los requisitos de las familias y garantizar el uso correcto de los fondos del bono de vivienda.

Impacto en las comunidades y la economía local

Más allá del beneficio directo para las familias, el Condominio Cristal genera un efecto positivo en el cantón de Cartago. Según datos del BANHVI, proyectos como este impulsan el empleo y la economía mediante encadenamientos productivos en sectores como la construcción, transporte, venta de materiales, alimentación y servicios inmobiliarios. Solo este desarrollo permitió la creación de aproximadamente 570 empleos directos e indirectos.

Estas inversiones no solo reducen el déficit habitacional, sino que fortalecen el tejido social al brindar espacios seguros, inclusivos y con acceso a educación, salud y oportunidades laborales. En palabras del propio BANHVI, cada subsidio de vivienda representa una puerta abierta hacia la estabilidad, el bienestar y el desarrollo comunitario.

Un paso hacia cantones más inclusivos

La construcción del Condominio Cristal es un ejemplo del impacto que pueden tener los programas de vivienda social cuando se desarrollan con planificación y visión de comunidad. Para las familias beneficiadas, representa mucho más que un techo: es el inicio de una nueva etapa en la que el acceso a una vivienda digna se traduce en esperanza y oportunidades.

En cantones como Cartago, donde persisten retos de desigualdad y déficit habitacional, este tipo de proyectos son un motor de transformación local. La inversión pública en vivienda no solo mejora las condiciones de vida de cientos de personas, sino que también dinamiza la economía y promueve entornos urbanos más seguros y equitativos.

Con el Condominio Cristal, Cartago da un paso firme hacia un desarrollo más humano y sostenible, donde la vivienda digna se consolida como base del bienestar social y comunitario.

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